Cirugia

La especialidad de cirugía oral abarca un gran número de tratamientos que se pueden realizar en la cavidad bucal como: extracciones de muelas del juicio  o dientes incluidos, fenestración o tracción de dientes retenidos (ejemplo; caninos incluidos), frenectomías (plastia de frenillos), apicectomías (cortar ápices de raíces infectadas), extirpación de quistes, cirugía preprotésica.

Terceros molares, muelas del juicio o cordales

Los terceros molaresmuelas del juicio o cordales suelen aparecer entre los 16 y 25 años, aunque a veces no aparecen nunca puesto que se sitúan en la última posición de la arcada (al fondo de la boca) y según su posición, suelen afectar al desarrollo de los dientes vecinos.

Según la posición, las muelas del juicio pueden estar erupcionadas, semi-incluidas o incluidas en boca:

  • Erupcionada: Cuando la corona de la muela está completamente fuera de la encía. A veces, aunque esté erupcionada, por la falta de espacio, salen en una posición más posterior, y provoca mordiscos, difícil higienización y consecuentemente caries entre los dientes. Por estas razones, en la mayoría de los casos realiza su extracción.
  • Semi-incluida: Cuando la corona ha erupcionado parcialmente y por lo tanto apenas se les ve la corona. Al no erupcionar completamente, se genera un espacio entre la corona y la encía que con el tiempo se llena de restos alimenticios o bacterias, produciendo una infección o pericoronaritis, que provoca; inflamación de la zona, dolor, limitaciones de apertura y dificultad al masticación. En estos casos, lo importante es tratar la infección y eliminar la causa (la muela de juicio)
  • Incluida: Cuando la corona no erupciona, habitualmente debido a que crece en una posición anormal anómala o queda impactada contra la muela que le precede. Ante un cordal incluido, las únicas opciones de tratamiento son; su extracción quirúrgica o controlar su evolución y ver si cambian de posición a lo largo del tiempo.

¿Cuándo se extraen las muelas del juicio?

Su extracción se realiza en los casos que:
  • Existe sintomatología: abcesos, caries, infecciones de repetición, dolor grave o agudo, dolor en la cara o incluso en el oido, fiebre etc.)
  • Existe algún signo radiológico patológico; quiste o erosión de raíces de otras piezas
  • Petición ortodóntica; por falta de espacio para una correcta alineación dental o con el fin de prevenir la recidiva.
  • Por prevención.

Diente retenido o incluído

Los dientes retenidos, también conocidos como incluidos o impactados, son aquellos dientes que, a pesar de haberse formado totalmente, no han emergido en boca y permanecen dentro del hueso parcial o completamente.

Tras los terceros molares, los caninos (colmillos) son los dientes que presentan mayores problemas de erupción por falta de espacio o por erupcionar en una posición incorrecta.

Debido a la gran importancia funcional y/o estética que tienen los caninos, el tratamiento más recomendable es la recolocación del mismo en la arcada dentaria mediante una intervención combinada entre el cirujano y el ortodoncista.

La intervención, y bajo anestesia local indolora, trata de realizar una pequeña apertura en el lugar donde se encuentra retenido el colmillo, también denominado fenestración, y luego el ortodoncista coloca un bracket o soporte que ayuda en su tracción.

Frenectomía o Plastia de frenillos

Los frenillos son bandas de tejido fibroso, muscular o ambas cosas, que suelen situarse en la línea media del paciente dentro de la boca. Se pueden insertar en el labio, en la lengua o en la encía. Pero los más conocidos son:

– Frenillo labial superior: El repliegue fibroso de mucosa en la línea media que conecta la cara interna del labio superior con la encía, hasta en el paladar.

¿Qué problemas puede ocasionar?
  • Separación de los dientes incisivos, provocando lo que llamamos diastema (link palabra cierre diastemas en estetica);
  • Limitación de los movimientos del labio superior;
  • Problemas para tragar saliva o para cepillarse;
  • Labio corto;
  • Problemas de funcionalidad de prótesis removibles.

Frenillo labial inferior: El repliegue fibroso de mucosa en la línea media que conecta la cara interna del labio inferior con la encía.

¿Qué problemas puede ocasionar?
  • Recesión/retracción gingival: la tensión del frenillo alrededor de la encía de los dientes inferiores hace que se retraiga o se baje, dejando al descubierto parte de la raíz del diente, provocando inflamación, bolsas periodontales e incluso movilidad del diente en los casos más graves.